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26 de febrero de 2018

Divagando...por los Collados del Asón

del verbo "divagar"
Hablar, escribir o pensar desordenadamente, sin ajustarse a un tema determinado y sin tener un objetivo para el discurso.

13 de enero. Hace frío, el invierno que se "comió el lobo" el año pasado, ha decidido adelantarse este año. Nieva en las montañas y llueve en el resto. No hay manera de "librar". Pero yo necesito "aire". Llevamos tiempo sin poder hacer ruta "decente", cuando no es una cosa es otra. 
¿Otro paseo? Ni de coña. Necesito montaña.
Collados del Asón, hasta donde se pueda.

Soba. Cantabria
13 enero 2018

Allá vamos. La carretera está despejada, un peligro menos.
Ya se ven las montañas. Hay nieve. Esos son los cordales del Portillo de la Sía. La Peña Lusa debe estar entera nevada. No creo que podamos subir muy alto.La nieve debe llegar por lo menos hasta Hondajón, Si nos deja llegar a Branavinto me conformo, podemos dar un buen paseo sin subir más de esa cota.

Soba. Cantabria
13 enero 2018

El Mortillano y el Mazo Grande, pues si que hay nieve. Recuerdo la primera vez que me "enamoré" de ese piquito de la derecha en forma de pirámide, el Mazo Grande. También estaba nevado, lo vimos ese día, desde el Ancillo y dije: "me gusta, lo quiero, cuando no tenga nieve tenemos que ir allí". Y allí fuimos unos meses después. Ya lo habíamos visto antes, la primera vez desde los Collados del Asón, camino de Hondajón, pero todo en esta vida tiene su momento, puedes pasar mil veces por el mismo lugar y siempre habrá cosas que te pasen desapercibidas, o que no reclamen tu atención, hasta que un día, sin saber por qué, te fijas, lo ves, sientes el flechazo y lo tienes que conocer.

Collados del Asón. Soba. Cantabria
13 enero 2018

Acabamos de llegar al parking. Cualquiera sube al Mortillano hoy! 
Casualmente escuché que un amigo y su grupo lo intentaron, pero tuvieron que abandonar por ahí arriba, en la base de la puntita. No me extraña. Allí arriba hay que ser muy prudente, es lapiaz, la nieve no solo dificulta el camino sino que puede ocultar las inmensas hoyas que se abren entre la roca. Es un terreno peligroso hasta con buena visibilidad. La nieve habrá tapado los hitos y sin esos puntos de referencia, no es nada aconsejable arriesgar.

Collados del Asón. Soba. Cantabria
13 enero 2018

La carretera. La famosa subida llena de curvas desde Asón. El pequeño mirador en voladizo donde los coches paran para ver de frente la cascada de Cailagua (el nacimiento del Asón) que ahora queda oculta a nuestra vista. Estamos un poco más altos, sobre ella.
El camino hacia el Mortillano pasa por aquella cabaña, en el verde que se ve más arriba de la carretera. Medio camino se ve despejado, la parte fácil. luego viene el bosque y a partir de ahí se complica, asi que con nieve...no te cuento más.

Collados del Asón. Soba. Cantabria
13 enero 2018

Se está mejor aqui. Vamos a lo seguro. Pista despejada y a caminar.
Hacia la izquierda dejamos la subida a Hondajón, seguro que estará precioso, pero no. Recuerdo aquella vez, cuando la nieve no había llegado tan abajo como ahora. Nos la encontramos a mitad camino y acabamos en un buen tramo metiendo las patas hasta la ingle. Divertido y emocionante, pero hoy sería una locura, debe de tener el doble o más.
A la derecha tenemos los Castros de Horneo, otra opción que descartar. Ni Horneo, ni la vuelta a Colina. La nieve empieza a asomar, dentro de un rato la encontraremos en el camino. Seguiremos de frente, hacia Brenavinto e intentaremos dar un paseo por el valle, tal vez hasta hasta Brenacobos, ya veremos.

Collados del Asón. Soba. Cantabria
13 enero 2018

El desvío a Colina. Pasamos. Los Castros de Horneo están bien nevaditos. Por ahi arriba también hemos estado, por camino marcado y de por libre, aunque es mejor no salirse de los hitos. Hay todo un mundo oculto que desde aqui no se ve. El camino a Colina rodea, pero hoy no es una buena opción. Bustalveinte tampoco, puede estar complicado. Seguimos hacia Brenavinto.

Collados del Asón. Soba. Cantabria
13 enero 2018

Una mirada atrás. Precioso. Esos dos ya regresan, se han dado un bonito paseo. 
La pista empieza a estar cubierta por la nieve y allá atrás veo nubes amarillas, detrás del Mazo Grande. Va a caer, cuando llegue aqui será en forma de nieve, pero aun tenemos tiempo de seguir disfrutando un poco más. cuando se ponga feo, volvemos.

Collados del Asón. Soba. Cantabria
13 enero 2018

Así pinta por delante. Brenavinto está ahí abajo, detrás de ese cambio de rasante. 
Nunca habíamos estado aqui con tanta nieve, Hoy no es buen día para subir muy alto.

Collados del Asón. Soba. Cantabria
13 enero 2018

Brenavinto. Bellísimo. 
A mi ya me da igual, solo con ver esto me conformo. Es una gozada. 
En lo que ahora parece un lago, debería de haber un camino. Hoy no se puede continuar por ahi. Tendremos que desviarnos hacia la derecha, hay dos senderos sobre la cabaña, el de abajo es el que nos sacará al otro lado de la laguna para poder continuar hacia Brenacobos por el valle. En un punto, se bifurca hacia el de arriba, que continua por la  media ladera alta, bordeando la montaña y subiendo. Es el camino hacia Colina, Bustalveinte, Valdició, y todo un laberinto de senderos y caminos que te llevan a lugares preciosos. 

Poljé de Brenavinto. Collados del Asón
13 enero 2018

Si que podría, parecerse a un lago, pero no lo es, su verdadero nombre es poljé. Serpentea por debajo el riachuelo cuyas aguas se desbordan cuando el sumidero no da abasto a absorber. Cuando se vayan las nieves, emergerá el vallecillo verde, con su meandro retorcido atravesándolo, y el camino a sus pies, pero hoy estaba asi.

Poljé de Brenavinto. Collados del Asón
27 mayo 2012

Encontré esta foto de hace unos años entre mis archivos, una imagen dice más que mil palabras...y si son dos, mejor. De mi enciclopedia visual de la naturaleza: esa es la definición de poljé.
Caminar es aprender, observar, comprender. 
No hacen falta palabras cuando las imágenes lo dicen todo.

Poljé de Brenavinto. Collados del Asón
13 enero 2018

Parece una serpiente..."el monstruo del lago Ness", es el meandro. 
A este lado de la tapia está el camino, ahora inundado por las aguas del deshielo. Doy fé que están frías, heladas. Recuerdo aquel día que volvíamos de Hondajón, Una pequeña parte del camino se había inundado, como si el río serpenteara con pequeños islotes donde pisar. No caímos en la cuenta del sendero en el que ahora estamos, demasiado ancho para saltar y apenas unos metros para llegar a la pista. Nos descalzamos para cruzar. Grave error. Agua congelada y tierra fangosa.
Experiencias y aprendizaje. Hipotermia. La sangre tardó en volver a circular con normalidad. Primero perdimos sensibilidad en los pies, luego dolor, por suerte la exposición no fue muy prolongada y aunque al principio caminábamos torpemente, ya secos y al movimiento entraron en calor y nuestros pies volvieron a responder. 
No fue una experiencia agradable, sobre todo por otras circunstancias que la acompañaron y que no viene al caso recordar. Todo tiene su enseñanza, la montaña es lugar de disfrute, pero también de conciencia y es muy importante no olvidar que en cualquier momento se pueden presentar dificultades inesperadas. La compañía adecuada y la capacidad de respuesta ante las situaciones adversas puede marcar la diferencia entre la diversión y la inconsciencia.

Collados del Asón. Cantabria
13 enero 2018

Hemos tomado el sendero a media ladera para salvar el lago. La idea es bajar de nuevo a la altura de aquella cabaña y continuar dando un paseo por la parte baja. Somos conscientes de que cuanto más subamos más nieve encontraremos y no estamos preparados para ese tipo de travesías. Por otro lado, el pronóstico del tiempo es lluvia, que aqui aparecerá en forma de nieve. El cuerpo nos pide más, acostumbrado a rutas más largas y exigentes, tiene la sensación de paseo.
No sé si consciente o inconscientemente, nos equivocaremos. Perderemos el desvío que baja y seguiremos subiendo. Hasta donde se pueda.

Collados del Asón. Soba. Cantabria
13 enero 2018

Seguimos cogiendo altura y el sendero cada vez tiene más nieve. Reconozco ese paso y sé a donde nos lleva. Pronto tendremos que dar media vuelta. Lo recuerdo sin nieve, es una parte del  terreno donde no conviene equivocarse. Hay huellas en la nieve, grandes, alguien ha pasado antes que nosotros equipado con raquetas. Donde los caminos desaparecen y las marcas han quedado enterradas, seguir las huellas parece la mejor opción. Pero no siempre, el que va delante puede haberse equivocado, o dirigirse hacia otro lugar que no es el elegido por nosotros, o ser un experto mejor equipado al que sería una locura seguir. 

Collados del Asón. Soba. Cantabria
13 enero 2018

A partir de aqui, ya no es una buena opción. Han empezado a caer las primeras gotas en forma de aguanieve, el camino se pierde, salvo las huellas de los que pasaron antes. Mi recuerdo está confuso, el paisaje nevado lo cambia todo, pero algo me dice, que a pesar de las huellas, el sendero no va por ahi. Un poco más adelante nos daremos la vuelta, las botas se hunden cada vez más y a pesar de no estar perdidos y saber exactamente donde estamos, no sería sensato avanzar más.
Suficiente para un día en el que no se podía hacer más.

Collados del Asón. Soba. Cantabria
13 enero 2018

El panorama por ahí abajo tampoco ofrece mejores perspectivas. Las pistas están cubiertas, donde no hay nieve, hay hielo, que patina más y es peor.
Hemos hecho lo correcto. Disfrutar de un hermoso paisaje nevado, un poco de emoción sin riesgo excesivo y una retirada a tiempo.

Collados del Asón. Soba. Cantabria
13 enero 2018

Regresamos. El objetivo está más que sobradamente cumplido.
No se trata de alcanzar un destino, ni de cotas, ni de metas, sino de objetivos.
La visión del poljé convertido en lago, la nieve alrededor, el silencio y la dureza salvaje de un entorno casi virgen, no manipulado por el hombre...es espectacular. El verdadero objetivo de una salida por la naturaleza, es que te cautive, que absorba todos tus sentidos y te haga disfrutar.
Un poco de emoción y de aventura, en su justa medida. Suficiente para abstraerte de cualquier otro problema o preocupación, pero sin llegar a generar desazón, miedo o sensación de peligro extremo.
Cuando saltan las alarmas, antes de que el disfrute dé la primera señal de convertirse en sufrimiento, has alcanzado tu meta y es el momento de regresar.

Collados del Asón. Soba. Cantabria
13 enero 2018

Tengo las manos heladas, no me he parado a sacar los guantes porque en cuanto bajemos un poco de cota ya no los necesitaré. Tengo que cubrir el objetivo de la cámara con la mano para que no se moje, llueve, o nieva, aqui son pequeñas gotas de aguanieve, abajo será lluvia, arriba estará nevando.
Saco las manos del bolsillo para llevarme esta imagen. Ese color rojizo de las hayas, Señales de un otoño tardío que se vió sorprendido por la llegada de un invierno precoz.
Nunca anduvimos por aquí con tanta nieve.

Collados del Asón. Soba. Cantabria
13 enero 2018

La nieve tiene su encanto,pero no deja de ser inquietante. Es bastante sencillo cruzar este hayedo siguiendo las marcas y el sendero. Pero en condiciones adversas puede convertirse en un laberinto. 
Entre los hayedos, especialmente en las zonas de lapiaz, puedes encontrar infinidad de senderos, unos se cortan, otros no llevan a ninguna parte, a veces uno y solo uno es el correcto, el viable, el seguro y el resto esconden peligros inesperados.
No es el caso,  estamos de vuelta sobre nuestros propios pasos que servirán para indicarnos la dirección correcta y enseguida empezaremos a bajar hacia la Posadía,  por el sendero que rodea el poljé, hasta llegar de nuevo a la pista. 

Collados del Asón. Soba. Cantabria
13 enero 2018

Llueve, es pronto, hoy acabaremos enseguida. 
No estaba muy claro que hoy se pudiera hacer algo, daban lluvia por todas partes. El tiempo nos ha regalado medio día, suficiente. Esta mañana me levanté con un claro propósito, necesitaba "aire" y los bocadillos están en mi mochila. La lluvia ahora es fina, hemos encontrado estas grandes piedras entre el hayedo y vamos a sentarnos a comer para apurar un poco más, antes de bajar.

Collados del Asón. Soba. Cantabria
13 enero 2018

Da pena marchar, pero ese cielo no tiene intención de alargar la tregua mucho más., allá al fondo, sobre las montañas, está nevando, pronto llegará aqui. Nos vamos.

Poljé de Brenavinto. Collados del Asón
13 enero 2018

Mis ojos se posan de nuevo sobre los ocres, sobre el verde, el marrón y el amarillo, sobre el negro y el blanco. Aún tengo frías las manos, pero me gusta...

Poljé de Brenavinto. Collados del Asón
13 enero 2018

Aquí el lago parece un río. En algunos puntos supera la altura de la tapia.
¿quién diría que bajo esas aguas se oculta el camino?
¡Qué diferente según la estación de año!

Collados del Asón. Soba. Cantabria
13 enero 2018

Ya no hay nubes amarillas por detrás del Mazo Grande. Todo es gris. 
El cielo se tornó plomizo y allá a lo lejos, está lloviendo, seguro.

Collados del Asón. Soba. Cantabria
13 enero 2018

Bien aprovechado el día. 
Bajando la pista nos pasó una pareja. Los de las raquetas, las huellas que seguimos allá arriba.
Ya le echaron valor! no obstante yo no quiero más.
No lo necesito. Les veo pasar deprisa y a mi me entra la calma. 
¿Equiparnos con raquetas? ¿para qué?
me gusta sentir bajo los pies, me gusta disfrutar cada paso, me gusta hundirme en la nieve...un poco, pero no demasiado....cuando todo todo se vuelve blanco....no es igual,
y prisa....ninguna, me perdería mil detalles por el camino y es el camino lo que me importa, 
no el final