No me asusta equivocarme....salvo que no tenga oportunidad de rectificar, nada como la propia naturaleza para enseñarte el valor de los pequeños detalles...
(por esos pequeños pasos atrás que cada día nos ayudan a avanzar más....)
camino de los Picones de Sopeña. 07 noviembre 2015
Puede que a veces, mi mente divague y se disperse. Se evade, ...se deja llevar...
despacito...
sentémonos a pensar.
Tal vez mi mente procese de una forma diferente,
no sabe, no puede, caminar hacia delante...
sin antes echar una mirada atrás.
camino de los Picones de Sopeña. 07 noviembre 2015
Basta un letrero, una flecha que señale, para saber donde estás...?
No.
Yo sé donde estoy:
en el medio de ninguna parte si no soy capaz de entender cómo y por qué...
por eso siempre miro atrás,
para comprender, para saber lo que hago,
para aprender de los errores siempre que pueda rectificar.
camino de los Picones de Sopeña. 07 noviembre 2015
Yo no veo montañas, ni me aprendo sus formas o su nombre...
mi mente está mirando atrás...
ahora mismo estoy ahí arriba, recorriendo paso a paso cada centímetro de ese cordal,
de los dos, de los tres cordales...porque son tres...
la vista engaña, la mente no
Recuerdo, las más cercanas, a este lado La Concha, al otro Valdició, recuerdo casi el punto exacto por el que asomamos a este lado y el punto por el que regresamos atrás...
la Porracolina, y todo el cordal que en la foto no se ve...cada paso de su acceso por Asón, por Bustablado, por Calseca, la bajada por el Mosquiteru y Peñalavalle, el tramo que nos falta desde Valdició o desde Colina o desde el Carrio...
Mi mente recorre de nuevo el cordal desde Lunada, paso a paso, y recuerda hacia donde giramos, qué vimos, hacia donde miramos....
y hoy lo veo desde aqui...y ya sé bien donde estoy.
los Picones de Sopeña. 07 noviembre 2015
y tambien miro hacia delante,
pero con respeto, con curiosidad y precaución,
esas aun no las conozco, no las he pisado...
quiero ver y saber lo que hay delante, porque vamos a pasar por detrás
y cuando estemos ahi arriba, yo sabré que habrá que tener cuidado.
recordaré esos picones, recordaré los cortados, recordaré que he de tener los ojos abiertos y bien firmes los pies...
desde los Picones de Sopeña. 07 noviembre 2015
ahora puedo asomarme sin miedo, no es osadía, ni desafío al peligro,
lo he visto antes, he calibrado la altura y siempre, prudente, afianzo primero mis pies,
donde no pueda caerme, donde fuera de peligro, mis ojos tambien alcancen a ver,
para cuando desde otro lado lo necesite saber...
bajo los Picones de Sopeña. 07 noviembre 2015
Ahora si, tal vez ahora sea más fácil entender...
el mapa está en mi mente,
así funciona mi instinto,
procesando cada uno de los pequeños detalles que antes grabó sin darse cuenta...
Mi mente estudió el terreno con cada mirada atrás.
llegado el momento de bajar, sabía en qué puntos podía estar esa hoya,
esa dolina, ese lapiaz. Los cortados del terreno, los desniveles.
el bosque....no necesitaba ver la pista, ni las señales,
sabía por donde y en qué dirección debía pisar...
los Picones de Sopeña. 07 noviembre 2015
No me asusta equivocarme,
ni me importa dar un paso alante y dos atrás,
si no lo entiendo, regreso,
Y de mis errores...
los Picones de Sopeña. 07 noviembre 2015
de mis errores solo me asusta...
chocar contra un muro sin tener oportunidad de rectificar
camino de los Picones de Sopeña. 07 noviembre 2015
De la experiencia se aprende, de los errores más, de nada sirve caminar hacia delante sin aprender de lo que dejamos atrás, por eso a mi me gusta recordar mis pasos, miro hacia arriba cuando estoy abajo y abajo cuando estoy arriba...
miro....y solo avanzo realmente, cuando soy capaz de entender...
camino despacio....a veces me paralizo, otras avanzo...
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